jueves, 7 de junio de 2007

Civilización del Valle Indus

  • Asentamientos

Desde el comienzo del cuarto milenio antes de nuestra era, la individualidad de las primeras culturas aldeanas comenzó a ser sustituida por un estilo de existencia más homogéneo. Para mediados del tercer milenio, una cultura uniforme se había desarrollado en asentamientos esparcidos sobre cerca de 500,000 millas cuadradas (800,000 Km2) que incluían partes del Punjab, Uttar Pradesh, Gujarat, Baluchistan, Sind y la costa de Makra.
La primera civilización india conocida, punto de partida de su historia, se remonta hasta alrededor del 3,000 antes de nuestra era. Descubierta en la década de 1920, se pensó que ésta estaba limitada al valle del río Indus, de ahí que el nombre que se le dio fue el de civilización del Valle Indus. Esta fue una civilización con un alto desarrollo urbano y dos de sus poblados, Mohenjodaro y Harappa, representan el nivel más alto de estos asentamientos. Excavaciones arqueológicas posteriores establecieron que los contornos de esta civilización no estaban restringidos al Valle Indus, sino que se expandían a un área más amplia en la India noroccidental y occidental. De ahí que a esta civilización se le conoce mejor ahora con el nombre de civilización Harappa. Mohenjodaro y Harappa están ahora en Pakistán y los sitios principales en la India incluyen a Ropar en el Punjab, Lothal en Gujarat y Kalibangan en Rajasthan.


  • Desarrollo Urbano

El surgimiento de esta civilización es tan importante como su estabilidad por cerca de mil años. Todas las ciudades estaban bien planificadas y construidas con ladrillos horneados del mismo tamaño. Las calles estaban trazadas en ángulos rectos con un elaborado sistema de alcantarillado cubierto. Existía una división bastante clara de las localidades y las casas estaban destinadas para las capas más altas o más bajas de la sociedad. También existían edificios públicos, el más famoso de los cuales es el Great Bath en Mohenjodaro y los amplios graneros. Además, se realizaban producciones de varios metales tales como cobre, bronce, plomo y estaño y algunos remanentes de los hornos dan testimonio de este hecho. El descubrimiento de hornos para hacer ladrillos sustenta el hecho de que los ladrillos horneados se utilizaban extensamente en la construcción de edificios domésticos y públicos.

  • Ocupaciones

Las evidencias también señalan el uso de animales domesticados, que incluyen camellos, cabras, búfalos de agua y aves. Los Harappenses cultivaban trigo, cebada, guisantes, sésamo y probablemente fueron los primeros en cosechar y hacer telas del algodón. El comercio parecía ser una de las principales actividades en el Valle Indus y la cantidad de sellos descubiertos sugiere que cada mercader o familia mercantil poseía su propio sello. Estos sellos aparecen en varias formas y tamaños cuadrangulares, cada uno con una figura humana o animal grabado en ellos. Los descubrimientos sugieren que la civilización Harappense tenía una relación comercial extensa con las civilizaciones vecinas en la India y otras tierras lejanas en el Golfo Pérsico y Sumeria (Iraq).


  • Sociedad y Religión

La sociedad Harappense estaba probablemente dividida de acuerdo a las ocupaciones, y esto también sugiere la existencia de un gobierno organizado.
Las figuras de las deidades en los sellos indican que los Harappenses adoraban a dioses y diosas de formas masculinas y femeninas y ya han desarrollado algunos rituales y ceremonias. Ninguna escultura monumental ha sobrevivido, pero se ha descubierto un gran número de estatuillas humanas, incluyendo el busto de un hombre hecho en esteatita que se piensa sea un sacerdote, y una sorprendente bailarina de bronce. Se han descubierto innumerables estatuas de la Diosa Madre hechas en terracota, lo que sugiere que la misma era idolatrada en casi todos los hogares.
Ya para alrededor de 1,700 antes de nuestra era, la cultura Harappense estaba en decadencia debido a repetidas inundaciones de los pueblos que estaban situados en las márgenes del río y debido también a cambios ecológicos que forzaron a la agricultura rendirse ante la expansión del desierto. Algunos historiadores no descartan las invasiones de tribus bárbaras del noroeste como la causa de la decadencia de la civilización Harappense. Cuando comenzaron las migraciones del pueblo Ario a la India, alrededor del 1,500 antes de nuestra era, ya la desarrollada cultura Harappense estaba prácticamente extinguida.

No hay comentarios: